No pasa un solo día sin que un nuevo artículo sobre el papel de la microbiota y cómo funciona sea publicado. Cada vez más estudios muestran su impacto positivo en nuestro bienestar.
Las bacterias están colocadas en el punto de mira en relación con un gran número de enfermedades y, en particular, enfermedades neurocognitivas devastadoras como la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad de Parkinson.
Sin embargo, un nuevo estudio acaba de revelar la acción de las bacterias intestinales en el mantenimiento de la fuerza muscular en las personas mayores y habla de un eje intestino-musculo, como ya se estaba hablando del eje intestino-cerebro.
El descubrimiento de esta nueva comunicación bidireccional entre las bacterias intestinales y nuestro cuerpo podría ayudarnos a comprender cómo envejece la microbiota intestinal, y aportarnos nuevas posibilidades para un envejecimiento más saludable.
En los albores del año 2020, los médicos y los pacientes optan por sustituir algunos tratamientos farmacológicos por la actividad deportiva, con el fin de aumentar la fuerza y la energía del cuerpo, y superar el concepto de fragilidad en los pacientes de edad avanzada ofreciendo un nuevo horizonte para un mejor envejecimiento.